El verdadero Feng Shui

Las malas traducciones del chino, generado multitud de malentendidos y equivocaciones a la hora de interpretar el Feng Shui. Estos errores se han ido generando por la asimilación de conceptos de Feng Shui, no traducidos directamente del chino, sino de otras versiones e idiomas, y también por el desconocimiento de la cultura china. Otras veces, estas malinterpretaciones han sido inventadas por los oportunistas, que se han aprovechado de la buena voluntad de la gente para ganar dinero a costa del Feng Shui.

ACLARACIONES SOBRE LOS CONCEPTOS DEL FENG SHUI

El Feng Shui es una ciencia ancestral que proviene del I Ching. Y no tiene que ver con ningún culto religioso. En la antigüedad, sólo las casas imperiales y nobles poseían el conocimiento de esta portentosa aplicación, denominada por los chinos: “Aplicaciones de emperadores”.

Hay distintas escuelas de Feng Shui, pero todas tienen como origen el I Ching. Las diferencias entre éstas residen en sus diferentes métodos para armonizar el entorno y enfatizar más un elemento del Feng Shui que otro. Por ejemplo, una escuela armonizará el Feng Shui de un espacio de una determinada manera basándose en mayor o menor medida en datos como la fecha de nacimiento, la anchura o la medida de la puerta de entrada o de la cama, la orientación de la casa, la influencia del cambio cíclico sobre nosotros, etc, y otra escuela armonizará el Feng Shui del mismo espacio basándose en estos mismos datos pero asignándoles unos valores algo diferentes. Sin embargo, la teoría básica siempre es la misma.

El Feng Shui no lo arregla todo.  El  Feng Shui no hace milagros, sólo puede arreglar ciertos desequilibrios generados por el hombre en el entorno. El éxito nunca cae del cielo, hay que trabajárselo, un proverbio chino dice: «Primero es el destino y la suerte, después el esfuerzo y en tercer lugar viene el Feng Shui. No puedes cargar el éxito o tu salud en el Feng Shui, el Feng Shui no es un talismán mágico que pone solución a todos tus problemas, aunque algunas personas  que se venden como expertos, lo anuncien, con el único objetivo de vender Feng Shui.

El Feng Shui se usa para ayudar a las personas que lo necesitan, no para enriquecerse. No sería lógico aconsejar comprar cosas caras para conseguir el equilibrio a quienes buscan soluciones en el Feng Shui porque tienen problemas de salud, dinero o familia. Mucho menos lógico aún sería aconsejarles comprar objetos y adornos que nada tienen que ver con el Feng Shui ni con Oriente como es el caso de las ahora populares bolitas de cristal. En realidad, la mayoría de los potenciadores que se venden se parecen más a un artículo de decoración exótico que a un auténtico potenciador de Feng Shui.

Para la escuela «San Yuen Jin Dan», el desequilibrio se puede arreglar con tan sólo tres cosas baratas y fáciles de conseguir: la piedra, la pecera y el espejo.  

Los factores del Feng Shui son variados y complejos.  En el Feng Shui no es solamente el Yin y Yang, y los 8 trigramas o 5 elementos. Feng Shui es mucho más complejo de lo que conocen normalmente los occidentales. En un principio el Feng Shui estudia los factores principales que influyen en las personas o cosas, como el «Chi», el campo magnético, la luz, el campo electromagnético, el agua, etc. Luego hay que mirar a cada persona según el año, la fecha y la hora de su nacimiento para saber qué tipo de equilibrio es el que le conviene o qué cambio hay que hacer en su vivienda, o lugar de trabajo, etc. También es muy importante tener en cuenta el calendario Lunar para hacer cambios importantes en tu vida (hacer obras, firmar contratos, etc.) en días y horas favorables.

No se puede distinguir entre el  Feng Shui de los cuatro animales y el Feng Shui de Pa Kua.  Para los chinos, el Feng Shui sólo se divide en «Feng Shui para las viviendas de los vivos» y «Feng Shui para las tumbas». Los «cuatro animales» es una forma de definir o simbolizar las orientaciones o puntos cardinales. No se pueden utilizar sólo estas orientaciones (animales) sin mencionar el Pa Kua, y tampoco se puede hablar sólo de Pa Kua sin tener en cuenta las orientaciones.   

Shu-Yuan Chen 

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